En el acuario, mantener una temperatura constante no solo se refiere al agua en su interior, sino también al sustrato y al aire sobre la superficie del agua. Después de todo, los peces son animales de sangre fría (se adaptan a la temperatura del entorno), pero exceder ciertos límites (temperaturas óptimas) afecta su salud. Para peces de agua caliente, la temperatura óptima está entre 22-28ºC, de ahí la necesidad de calentar el agua (la temperatura promedio de la habitación es de 18-21ºC). Para peces de agua fría (incluidos los locales), la temperatura óptima no supera los 20ºC, y en invierno no debería superar los 5ºC. Se utilizan calentadores para calentar el acuario.
Seleccionamos el calentador adecuado para nuestro acuario en base a su potencia de calentamiento. La selección de un calentador de la potencia correcta está principalmente influenciada por el tamaño del tanque, pero también son factores importantes: el uso o no de una cubierta para el acuario (una cubierta adecuada puede proporcionar un excelente aislamiento térmico), el tipo de calefacción de la habitación donde se ubicará el acuario (si tienes calefacción central constante, solo necesitas calentar ligeramente el acuario), y el uso o no de un termostato. Para acuarios pequeños y medianos (hasta 80 litros), se asume que cada 1 litro de agua debe calentarse con 1 W. Para tanques grandes, se aplica el siguiente cálculo: 0,5 W de potencia por cada litro de agua.